¿Cómo comenzar de cero?
La expresión que usualmente se escucha a fin de año es: “año nuevo, nuevo yo”. ¿Nuevo yo? Me he preguntado año tras año. ¿Por qué no mejor reiniciar? Veamos cómo comenzar de cero.
Sí, otro cliché. No considero que sea necesario comenzar de cero. Además, sería prácticamente imposible. Al menos que vuelvas a nacer o tengas un accidente que borre absolutamente todas tus memorias. ¿Por qué querríamos eso? ¿Qué pasa con lo que ya sé? ¿Por qué anhelo no tener estos recuerdos? Quizás porque esos recuerdos están ligados a emociones desagradables y aún es difícil para ti manejarlos.
Emociones y recuerdos
El psicólogo cognitivo, Gordon H. Bower, hizo una investigación acerca de cómo almacenamos y evocamos los recuerdos según nuestro estado de ánimo. En esta, encontró que las personas tenemos una mayor facilidad de memorizar elementos en un estado de ánimo semejante al que tenemos en el momento de evocarlas. Es decir que, por ejemplo, estando felices evocaremos más fácil ideas o recuerdos que se guardaron en la memoria estando felices. Y, así, pasa con los otros estados de ánimo.
También, llamó “procesamiento congruente con el estado de ánimo”, cuando el estado de ánimo impacta en el momento de seleccionar lo que guardamos en la memoria. Es decir, qué información es más relevante para posteriormente poder recuperarla. Dijo que si estamos de buen humor tendremos mayor probabilidades de prestar atención a ideas o situaciones que valoramos como positivas e inversa.
Entonces, podríamos concluir que cuando nos pasa algo y está ligado a una emoción intensa, en el momento en el que pensemos en eso vendrá una ola de esa emoción que no queremos sentir nuevamente. ¿Qué podemos hacer para aliviar esto? Hablar. Hablar cura y nos transforma. Ir a terapia siempre hace la diferencia. No querrás comenzar de cero, porque te darás cuenta que todo ha sido necesario para llegar donde estás.
Utiliza los recuerdos a tu favor
Los recuerdos que tenemos son solo nuestros. No hay nadie, aunque haya estado contigo en esa misma situación, que guarde la información como tú. Sí, puede que suene medio absurdo, pero eso solo te pertenece a ti, al igual que tus emociones.
Entonces, como estos recuerdos sólo te pertenecen a ti los puedes utilizar a tu favor. Puedes tomarlos como un punto de inicio en la búsqueda de tu salud mental y emocional.
Las emociones que acompañan nuestra historia no son buenas ni malas, solo son. Quizás, algunas sean más agradables que otras y eso está bien. ¿Recuerdas que dije que hablar cura? ¿Qué tal si llevas esto a la práctica? ¿Lo has considerado?
Haciendo las paces con mi yo
Es importante que sepas que tú no tienes nada malo. Tus emociones, recuerdos, ideas, pensamientos, conclusiones, no son “malas”. Puede que sean diferentes, puede que no te hagan sentir satisfecho o satisfecha, puede que te paralicen, pero son tuyas y puedes hacerte cargo de repararlo si así lo deseas.
¿Qué tal si hacemos un ejercicio? Mírate al espejo. Ese o esa que ves ahí eres tú. Eres real y yo también te puedo ver. Estás en este mundo porque eres importante y no es necesario que comiences de cero, puedes evolucionar a partir de ahora.
Poco a poco, cuando lo decidas, puedes ir haciendo las paces contigo. Aceptando que no solo tenemos emociones agradables, sino que también están las desagradables y que todas forman parte importante de nuestro mundo. ¿Cómo experimentaríamos la calma si no conocemos la frustración?
Texto escrito por: Stephanie Smith. Psicóloga.
Fuentes:
- Pérez Leal, M. (2020, 3 diciembre). 5 Fenómenos Interesantes De Nuestra Memoria. Nueces Y Neuronas. http://www.nuecesyneuronas.com/5-fenomenos-interesantes-nuestra-memoria/